MÉDICOS POR EL DESARME NUCLEAR Y EL COMPROMISO DE REINALDO MIÑO
“Sueño en un mundo de
paz, en el pan compartido y la felicidad humana”
R. Miño
En 1980 y teniendo como
antecedentes organizaciones nacionales con fines similares, así como los
informes de médicos y personal de salud japoneses sobre los daños a la salud
inmediatos y a largo plazo que produjeron las bombas atómicas lanzadas por
Estados Unidos de Norteamérica contra población civil inocente de las ciudades
de Hiroshima y Nagasaki, se formó la “Asociación Internacional de Médicos para
la Prevención de la Guerra Nuclear”, AIMPGN (en inglés International Physicians
for the Prevention of Nuclear War, IPPNW)
La AIMPGN es una organización
creada por médicos y organizaciones médicas soviéticos y estadounidenses en los
tiempos de la guerra fría, para la prevención de la guerra nuclear y desarme de
las armas nucleares. En 1985 se la reconoció con el Premio Nobel de la Paz, y en
la actualidad está presente en más de 60 países. Sus fundadores y personajes
más destacados fueron Bernard Lown (Estados Unidos) y Evgueni Chazov (Unión
Soviética); que no pocos problemas de persecución política tuvieron por su
posición firme de defensa de la vida y por el desarme.
Los programas y campañas de la
AIMPGN se han ampliado más allá de su oposición a las armas nucleares, y son
fundamentalmente tres:
· Campaña por un Mundo Libre de Armas Nucleares.
· Campaña Internacional para prevenir la violencia
con armas menores.
· Investigación, educación y defensa de la
conexión entre paz y salud.
La AIMPGN contribuyó a que las Naciones
Unidas aprobaran el “Tratado sobre la No Proliferación de las Armas Nucleares
(TNP)”, que entró en vigencia en el año de 1970 y que ha tenido conferencias cada
cinco años para su seguimiento.
En enero del presente año 2023, a
propósito de los nuevos y graves riesgos de una amenaza nuclear por la guerra
entre Rusia y la OTAN que se libra en territorio ucraniano, con graves
consecuencias para su población civil; y en el marco también de las tensiones crecientes
entre USA y la República Popular de China; miembros de varios países de la AIMPGN
se manifestaron en Hamburgo para exigir la eliminación de todas las armas
nucleares. “Este es un llamamiento a la paz. Y una exigencia para que se
destruyan todas las armas nucleares” explicó la AIMPGN.
En los primeros años luego de la
fundación de la AIMPGN, se formaron núcleos en algunos países latinoamericanos.
En el Ecuador, quienes se comprometieron con ese objetivo fueron, entre otros,
distinguidos colegas como Plutarco Naranjo, Oswaldo Rodríguez, Herbert Reyes,
Medardo Villalba y Reinaldo Miño; este último actuó como coordinador del núcleo
ecuatoriano de la AIMPGN, mejor conocida en el país como "Médicos por la Paz".
Es conocido el compromiso de
Plutarco Naranjo con varias causas, más allá de las actividades netamente médicas,
de salud pública o de investigación. De hecho, fue un destacado miembro de la
Academia Nacional de Historia. Pero Plutarco Naranjo fue también un militante
socialista, que en su vida asumió varios compromisos políticos, incluyendo la
denuncia del holocausto judío durante la segunda guerra mundial, y el compromiso
con la AIMPGN por el desarme nuclear.
De Oswaldo Rodríguez y Herbert
Reyes, destacados neurólogos del HCAM del IESS, pocos conocían sus actividades
políticas diversas. La lucha contra las armas nucleares fue una de tantas.
Pero quizá de entre los
personajes poco reconocidos por combinar su gestión como médicos con su
activismo político, destacan Medardo Villalba y Reinaldo Miño. Tuve la oportunidad
de conocer al doctor Reinaldo Miño a fines de la década de 1980, precisamente
en un evento en Quito en el que buscaba nuevos adherentes a la lucha por el
desarme nuclear. Con Medardo Villalba en cambio interactuamos y compartimos mucho,
tuvimos mucha afinidad; junto a Alberto Narváez, César Ayora y Medardo
Villalba, fundamos la Asociación de Médicos de Salud Pública de Pichincha
(AMESPU), allá por el año de 1987. AMESPU fue una de las organizaciones destruidas
durante el gobierno de Correa.
Creo que los médicos tenemos una
deuda con el legado de personajes como Reinaldo Miño (1924-2006), pero los
historiadores también. No fue el primero que introdujo fuertemente la relación
entre salud y condiciones sociales, económicas y políticas; porque antes ya
hubo personajes de gran talla, como Pablo Arturo Suárez o Ricardo Paredes, que
a su vez recogieron el legado de Eugenio Espejo.
Pero, Reinaldo Miño, fue un
destacado personaje de la medicina ecuatoriana con enfoque social, en la segunda mitad del siglo
XX, un gran escritor, en especial de ensayos históricos, pero también poeta,
muy orgulloso de sus raíces andinas, y sobre todo un activista inclaudicable, militante
comunista, a quien, bien deberíamos tener como referente[1].
Hugo Noboa Cruz, agosto 2023
[1] En
el año 2007, luego de su muerte, en la Revista Ecuatoriana de Historia “Procesos”,
Enrique Ayala Mora hace un obituario de Reinaldo Miño https://revistas.uasb.edu.ec/index.php/procesos/article/view/2277/2058
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